LOS CONFINES

Ultimo libro de Andrés trapiello y que difiere por completo con su forma de escribir o al menos con todo lo que llevo leido hasta ahora de él.

DONDE QUIERA QUE SE ENCUENTRE UN POCO DE AMOR NADIE PUEDE DECIR QUE NO ESTE SUCEDIENDO UN ACTO SUBLIME Y MISTERIOSO.

La historia al principio resulta un tanto extraña hasta que uno consigue centrarse en ella y es cuando se va poco a poco consiguiendo entender los hechos que en ella se cuentan.

La historia, es la de la Claudia, una , una médica casada que lleva varios años intentando tener un hijo sin conseguirlo. Su matrimonio pasa por una crisis desde el momento que su marido mostrara su desacuerdo ante la posibilidad de una adopción.

Por otra parte Max es ingeniero, casado con Cathy, padre de dos hijos y con una vida que él creía hasta ese momento totalmente plena.

Ambos van a coincidir en Constanza (Colombis) en la boda de una de sus mejores amigas. En ese ambiente, sofocante y sensual surgen unos sentimientos entre ellos que les deja atónitos, felices, llenos de de plenitud y que a partir de ese momento van a ser irremediables a pesar de de las enormes dificultades personales y sociales que tendrán que afrontar.

Una novela osada, revolucionaria, polémica, que conmueve y defiende que la premisa para la bondad es la libertad.

Y ASI, COMO PARIENTES QUE SE ENCUENTRAN DE NOCHE, SEGUIREMOS CONVERSANDO. HASTA QUE LA TIERA SELLE NUESTROS LABIOS, HASTA QUE EL MUSGO CUBRA NUESTROS NOMBRES.

Es la frase con la que acaba el libro y que me ha parecido muy hermosa por ese me ha parecido un buen detalle ponerla en esta entrada del blog.

EL CONTADOR DE ARENA

Acabo de leer este libro EL CONTADOR DE ARENA, el cual me ha sorprendido gratamente.

Su autora, Gillian Bradshaw, autora entre otros de "EL FARO DE ALEJANDRÍA", muestra un
buen conocimiento del tema y te introduce en esta historia de una manera muy agradable.

El libro nos habla de Arquímedes, un chico joven y muy adelantado a su tiempo y conocido universalmente por el CELEBRE PRINCIPIO DE ARQUIMEDES.

En esta novela, la autora nos muestra a un Arquímedes de carne y hueso, notable científico,
matemático y pensador.

Un ser humano excepcional inmerso en una època muy convulsa, la que le tocó vivir y rodeado
de conflictos y dilemas que le toca vivir.

Nos cuenta su vida en Alejandría, por la que se siente deslumbrado, ciudad donde ha vivido tres años y donde decide quedarse a vivir para siempre. Pero se ve obligado a regresar a Siracusa, su ciudad natal, para ocuparse de su padre enfermo.

Allí se encontrará de frente con los conflictos de la guerra entre Siracusa y la poderosa Roma. Se le encomendará la labor de construir ciertos artilugios de guerra para intentar repeler a los invasores.

Todo un periplo en su vida, y que a la postre, le obligará a recorrer un sendero salpicado de gloria, amor, guerra y traición.

Lo cierto es que me ha sorprendido este libro, no esperaba que la vida de este ilustre personaje
fuera contada de una manera tan sencilla y a la vez que atrapa al lector.

Amar la lectura

Amigas y amigos amantes de la lectura

Un proverbio hindú dice que “Un libro abierto es un cerebro que habla; cerrado, un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora”. Sin pretender mejorar la cita, creo que podemos añadir que un libro compartido es una buena manera de ampliar la mente y hacer amigos.

Estamos aquí hoy, no sólo compartiendo nuestro amor a la lectura, sino también compartiendo el pan y la sal de la amistad, una amistad que se va fraguando con cada libro que descortezamos, expurgamos y a veces maltratamos juntos.

Cada uno de nosotros seguramente, hemos llegado a la lectura por caminos y motivos distintos. Cada cual disfrutamos de la lectura en momentos, lugares, y dosis diferentes.

Yo no tengo reparo en decir que fueron las tediosas esperas en los aeropuertos, los interminables viajes transoceánicos, y sobre todo las solitarias noches de hotel lo que me forzó a abordar la lectura no tanto para aprender como para poner alas al tiempo y rellenar largos huecos de por otra parte una ajetreada vida laboral.

Afortunadamente, esta necesidad se fue convirtiendo en afición y luego en pasión. Hoy, quizá de manera un tanto ecléctica, mezclo la lectura de reflexión con la lectura puramente de evasión, y me sentiría mal sin un libro al alcance de la mano.

Probablemente cada uno de vosotros y vosotras tiene una historia semejante de cómo o por qué ha llegado a ser un aficionado a la lectura. Pero ahora, además tenemos todos un rasgo en común: no sólo nos gusta leer, nos gusta compartir nuestras lecturas.

Por poco tiempo que llevemos en este club, seguramente ya nos hemos dado cuenta que ninguno de nosotros leemos los libros de la misma manera, vemos las mismas cosas, nos llaman la atención, nos impresionan, nos conmueven, nos escandalizan o nos causan rechazo las mismas frases. Incluso a veces interpretamos la misma escena de manera diametralmente opuesta. Y es bueno, estimulante y enriquecedor que así sea. Por eso precisamente disfrutamos confrontando nuestra visión del texto y de paso enriqueciéndonos de la visión de los demás.

Por otra parte, inevitablemente, nos vamos conociendo mejor, y cuando se tiene la mente abierta, compartir ideas y conocer a los demás es la base de una buena amistad.

Brindo por la lectura compartida y brindo siempre por la amistad.

(Brindis de Federico en el encuentro de Clubes de Lectura de las Bibliotecas Municipales de Burgos)

Reflexiones

Es bueno tener unas ideas madres a las que acudir para apoyarnos en los momentos más importantes de nuestra vida: nuestra dignidad de hombres, todo lo que tenemos de verdadero, de bello, de fortaleza, de bondad. Aunque no siempre es fácil volver a nuestro origen: tantos ruidos lo desdibujan, lo ensombrecen, lo ocultan. Ojalá tengamos siempre a nuestro lado alquien que nos quiera y nos recuerde esa canción: Nuestra propia canción. Este es el título del relato con el que Ignacio amenizó nuestra velada estival. Esperamos que también amenice la vuestra.

Nuestra propia canción

"Cuando una mujer de cierta tribu de África sabe que está embarazada, se interna en la selva con otras mujeres y, juntas, rezan y meditan hasta que aparece la canción de la criatura. Saben que cada alma tiene su propia vibración, que expresa su particularidad, unicidad y propósito.
Las mujeres entonan la canción y la cantan en voz alta. Luego retornan a la tribu y se la enseñan a toda la gente.
A la hora del nacimiento, la comunidad se junta y le cantan su canción. Luego, cuando la criatura comienza su educación, el pueblo se junta y le canta su canción. Cuando se inicia en la edad adulta, la gente se junta nuevamente y canta. Cuando llega el momento del casamiento, vuelve a escuchar su canción. Finalmente, cuando el alma va a irse de este mundo, la familia y amistades se acercan a su cama e, igual que en su nacimiento, le cantan su canción para acompañarlo en la transición.

En esta tribu de África hay otra ocasión en la cual la tribu canta la canción. Si en algún momento, durante su vida, alguna persona comete un crimen o un acto social aberrante, se le lleva al centro del poblado y la gente de la comunidad forma un círculo a su alrededor. Entonces le cantan su canción.
La tribu reconoce que la corrección para las conductas antisociales no es el castigo; es el amor y el recuerdo de su verdadera identidad. Cuando reconocemos nuestra propia canción ya no tenemos deseos ni necesidad de hacer nada que pudiera dañar al resto.
Tus amistades conocen tu canción y te la cantan cuando la olvidaste. Quines te aman no pueden sufrir engaño por los errores que cometes o las oscuras imágenes que muestras en público. En esos momentos recuerdan tu belleza cuando sientes fealdad; tu totalidad cuando estás quebrada/o; tu inocencia cuando te sientes culpable y tu propósito cuando te confundes.
No necesito una garantía firmada para saber que la sangre de mis venas es de la tierra y sopla en mi alma como el viento, refresca mi corazón como la lluvia y limpia mi mente como el humo del fuego sagrado."

Pues si, un año mas y con un brindis acabó nuestro Club de Lectura.

En él hemos compartido muchas cosas, este año hemos conocido a nuevos compañeros y nuestra lista de lectura se ha visto aumentada.

Hemos pasado buenos ratos, y a veces los ánimos se han salido de contexto cuando nuestras opiniones no coinciden con las de los demás, pero en general la experiencia es muy positiva y merece la pena.

Ahora deberemos esperar a que finalice el verano y de nuevo comenzaremos un nuevo ciclo que espero sea tan agradable como los anteriores.

Bueno chicos/as, a disfrutar del verano y hasta la próxima. Y no olvideís que en este blog podemos seguir en contacto y podeís ir contando los libros que estaís leyendo.